Cuatro destinos para escaparse un fin de semana desde Londres
Viajar es una de las experiencias más enriquecedoras que existen. Entre los numerosos destinos, Europa cuenta con lugares perfectos para pasar un fin de semana inolvidable lejos de Londres. Ciudades como Edimburgo o York son algunos de los sitios con más encanto en Reino Unido, sin embargo, si prefiere salir del país hay otros destinos perfectos como Roma, e incluso ofertas para viajar a Andorra idóneas para descubrir otros bonitos lugares lejos de las tierras británicas.
Andorra, un pequeño rincón de los Pirineos
El pequeño país de los Pirineos es un destino poco conocido para gran parte de los viajeros londinenses. Un paraíso entre montañas que suele ser sinónimo de diversión para los amantes de la nieve, que pueden encontrar interesantes ofertas para esquiar en Esquiades.com, pero Andorra también ofrece otras muchas otras opciones para disfrutar de un fin de semana inolvidable. Para las personas que quieren descansar de su vida diaria en Londres, el centro balneario de Caldea es una de las mejores opciones que ofrece el territorio andorrano. Ubicado en el municipio de Escaldes-Engorday, este moderno espacio se ha convertido en un auténtico icono del país. Actualmente, este centro termal es el segundo más grande del continente europeo con más de 30.000 metros cuadrados.
Hablar de Andorra es hacerlo de un país destinado a la diversión en diferentes situaciones. El shopping es otra de sus principales elementos atrayentes para los viajeros. El singular régimen fiscal del Principado, sin IVA en sus productos, convierte al país en un destino perfecto para comprar productos electrónicos, ropa, tabaco, alcohol o perfumes para volver a Londres con la maleta llena. Para ello, la visita a Andorra la Vella es una parada indispensable en el viaje.
Roma, la ciudad eterna
La ciudad eterna es una de las más visitadas de Europa, millones de turistas disfrutan cada año del arte, historia y cultura que ofrecen los rincones de Roma. Entre los monumentos imprescindibles en una visita a la capital de Italia se encuentran la Fontana Di Trevi, considerada para muchos viajeros como la fuente más bonita del mundo. Un sitio que se encuentra lleno de turistas a cualquier hora del día pero que merece la pena visitar para disfrutar de su majestuosidad, además, la tradición cuenta que hay que tirar una moneda en la fuente si se quiere regresar a Roma.
Junto a la Fontana Di Trevi, el Coliseo es otro de los iconos de la ciudad y de todo el mundo, un lugar que sumerge a los visitantes en la época de esplendor del Imperio Romano. Además de estos monumentos, Roma cuenta con numerosas plazas a lo largo de sus calles, destacando por encima de todas la Piazza Navona. En este lugar se encuentran tres fuentes de origen barroco como la Fontana dei Quattro Fiumi, Fontana del Moro y Fontana del Nettuno.
Edimburgo, uno de los lugares más bonitos de UK
Para los viajeros que prefieran viajar por el Reino Unido, Edimburgo se sitúa como uno de los destinos más bonitos para visitar en un fin de semana. El Castillo de Edimburgo es el principal atractivo turístico de la ciudad, e incluso de toda Escocia. Esta fortaleza del siglo XII se ubica en pleno centro histórico, sobre la colina de Castle Rock. Además, los turistas que visiten este destino en agosto pueden disfrutar de la Royal Edinburgh Military Tattoo, un famoso desfile militar que se celebra en este majestuoso enclave. Desde el Castillo de Edimburgo hasta el Palacio de Holyrood, palacio del siglo XII y residencia oficial de la reina Isabel II en Escocia, hay exactamente 1,8 km que se conocen como la Royal Mile, la calle más popular de la ciudad medieval.
Calton Hill es una de las colinas más representativas de la ciudad, un lugar perfecto para ver un bonito atardecer y contemplar la puesta de sol mientras se observa unas vistas inmejorables de Edimburgo. Además, en este lugar se encuentran monumentos como Dugald Stewart Monument, The National Monument of Scotland o The Nelson Monument.
York, el encanto de una ciudad medieval
A 280 km de Londres, unas cuatro horas en coche, se encuentra York, una de las ciudades más emblemáticas e históricas del Reino Unido. Esta ciudad medieval del norte de Inglaterra sumerge a los viajeros en un ambiente propio de la época medieval a través de sus estrechas calles. Su pasado histórico es uno de los más ricos de toda Inglaterra. Esto se debe principalmente a su ubicación estratégica con la confluencia de los ríos Ouse y Foss. La ciudad fue fundada por los romanos en el año 71 d.C. Posteriormente fue la capital de uno de los territorios vikingos, una unión que se puede rememorar en la visita al Centro Vikingo Jovick. Para conocer mejor la historia de York lo más recomendable es visitar el Museo de Yorkshire, que además alberga uno bonitos jardines donde se encuentran las ruinas de la Abadía de Santa María.
The Shambles es la calle más famosa de este destino, de hecho, es considerada la más antigua de toda Gran Bretaña. Su nombre proviene de las numerosas carnicerías que se ubicaban en este espacio durante épocas anteriores. Cerca de esta calle se encuentra la catedral de York Minster, otro de los lugares imprescindibles. Esta catedral gótica es la más grande del norte de Europa después de la de Colonia y el edificio más alto de la ciudad. Un lugar histórico y con leyendas tan interesantes como la de la vidriera conocida como Heart of Yorkshire, el corazón de Yorkshire, en la que se dice que si dos enamorados se besan bajo esta vidriera su unión será eterna.